Esta semana a punta de chingadazos me he dado cuenta de tantas cosas, no he hecho mas que reflexionar acerca de las cosas que realmente importan y valen en esta vida.
La calaca nos visitó muy de cerca, se llevó a una persona que directa o indirectamente tomaba parte de el círculo en que nos movemos la mayoría de los contemporáneos fiesteros. Ha sido una semana intensa, en el sentido introspectivo, al menos para mí. Le he dado tantas vueltas a tantas preguntas, inquietudes y temores...
La muerte en sí no me asusta, eso siempre es señal de que algo mejor y nuevo comienza. Nadie le teme a nacer o a dar vida a alguien, por que entonces le tememos tanto a la muerte?
En lo personal, me daría tristeza dejar a mi gente.Me pesaría mucho irme con cuentas pendientes, "te quieros" sin decir, abrazos sin dar, carcajadas sin soltar... Me gustaría irme de este mundo cansada de vivir, de viajar, de bailar, de cantar...
Por qué esa necedad entonces del ser humano de aferrarse a cosas sin valor?, de desperdiciar momentos valiosos en cosas tan monótonas y sin sentido?
Es tiempo de hacer todo eso que no hemos hecho, es tiempo de cagarte de risa, es tiempo de querernos, es tiempo de disfrutarnos, de decirnos cosas bonitas, de poner ese disco que te encanta, de ir a conocer ese lugar que soñamos, de ponerte tu ropa favorita, de hacer alguna locura, de llamarle a esas personas que no has visto en mucho tiempo, de disfrutar este momento... es tiempo de VIVIR!.
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